viernes, 8 de febrero de 2013

Prólogo completo de Princesa Mecánica


Traducción nombre la fuente: Adicción CDS y Alacante.

York, 1847.

"Tengo miedo", dijo la niña sentada en la cama. "Abuelo, ¿puedes quedarte conmigo?"Aloysius Starkweather hizo un ruido impaciente en la parte posterior de su garganta mientras sacaba una silla cerca de la cama y se sentó. El ruido impaciente era sólo en parte verdad. Le complacía que su nieta confiara en él, que a menudo era el único que podía calmarla, su comportamiento brusco nunca le había molestado, a pesar de su delicada naturaleza."No hay nada que temer, Adele", dijo "ya verás"Ella lo miró con los ojos grandes. Normalmente la ceremonia de la primera runa habría tenido lugar en uno de los espacios del Instituto de York, pero a causa de los nervios frágiles de Adele y su salud, se había acordado que podría ocurrir en la seguridad de su dormitorio. Ella estaba sentada en el borde de la cama, con la espalda muy recta, su vestido ceremonial era rojo, con una cinta roja deteniendo el pelo fino y rubio. Sus ojos eran enormes en su cara delgada, con los brazos estrechos. Todo en ella era frágil como una taza de porcelana."Los Hermanos Silenciosos", dijo. "¿Qué van a hacer conmigo?""Dame tu brazo," dijo él, y ella extendió su brazo con confianza. Le dio la vuelta, viendo los trazos azul pálido de las venas bajo la piel."Van a utilizar sus estelas, ya sabes lo que es-una estela para dibujar una marca en ti. Suelen comenzar con la runa de Visión, que la conoces porque la has estudiado, pero en tu caso comenzarán con la runa de Fuerza.""Porque yo no soy muy fuerte"."Para hacerte más fuerza"."Como un caldo de carne." Adele arrugo su nariz. Él se echó a reír. "Esperemos no tan desagradable. Sentirás un pequeño pinchazo, así que tienes que ser valiente y no llores, porque los Cazadores de Sombras no lloran de dolor. Entonces, el pinchazo se habrá ido, y tú te sentirás mucho más fuerte y mejor. Y será el final de la ceremonia, y vamos a ir abajo y habrá pasteles helados para celebrar "Adele se paró en sus talones. "¡Y una fiesta!""Sí, una fiesta. Y regalos." golpeó su bolsillo, donde estaba escondida una pequeña caja - una pequeña caja envuelta en un fino papel azul, que contenía un anillo de la familia aún más pequeño. "Tengo uno para ti aquí. Lo tendrás cuando la ceremonia haya terminado.""Nunca he tenido una fiesta para mí antes"."Es porque te convertirás en una Cazadora de Sombras", dijo Aloysius. "Sabes por qué eso es importante, ¿no? Tu primera marca significa que eres una Nefiilim, como yo, como tu madre y padre. Quieren decir que eres parte de la Clave. Parte de nuestra familia de guerreros. Algo diferente y mejor que todos los demás ""Mejor que todos los demás", repitió ella lentamente mientras la puerta del dormitorio se abría y dos Hermanos Silenciosos entraron. Aloysius vio un parpadeo de miedo en los ojos de Adele. Ella saco su mano asustada. Frunció el ceño, a él no le gustaba ver el miedo en sus descendientes, aunque no podía negar que los Hermanos eran espeluznantes en su silencio y sus movimientos peculiares. Se trasladaron hacia un lado de la cama de Adele, la puerta se abrió de nuevo y la madre y el padre de Adele entraron: su padre, el hijo de Aloysius, en traje escarlata, y su mujer en un vestido rojo que se ceñía a la cintura, y un collar de oro de la que colgaba una runa.Sonrieron a su hija, quien les dio una sonrisa temblorosa en respuesta, mientras los Hermanos silenciosos la rodeaban."Adele Lucinda Starkweather". Era la voz del primer Hermano Silencioso Cimon . "Estas en edad. Es hora de que la primera marca del ángel a ser otorgado a ti. ¿Eres consciente del honor que se te da, y harás todo lo que esté en tu poder para ser digna de ella?"Adele asintió obedientemente. "sí"."¿Y aceptas estas marcas del Ángel, que estarán en tu cuerpo para siempre, un recordatorio de todo lo que le debes al ángel, y tu deber sagrado para el mundo?Ella volvió a asentir obedientemente. El corazón de la Aloysius se hinchó de orgullo. "las acepto también", dijo."Entonces empezamos". La estela brillo, en la mano larga y blanca del Hermano Silencioso, Él tomó el brazo tembloroso de Adele y fijo la punta de la estela de su piel, y comenzó a dibujar.Las líneas negras se arremolinaban fuera de la punta de la estela, y Adele miró con asombro como el símbolo de la fuerza tomaba forma en el interior, un delicado diseño de líneas que se cruzan entre sí, atravesando sus venas, envolviendo su brazo. Su cuerpo se tensó, sus pequeños dientes se hundieron en el labio inferior. Sus ojos brillaban mirando a Aloysius, y empezó por lo que vio en ellos. Dolor. Era normal sentir algo de dolor en el otorgamiento de una marca, pero lo que vio en los ojos de Adele - Era agonía.Aloysius se enderezó, tirando la silla en la que había estado sentado. "¡Alto!" -gritó, pero ya era demasiado tarde. La runa estaba completa. El Hermano Silencioso apartó la mirada. Había sangre en la estela, Adele gemía, "Ella gemía consciente de la advertencia de su abuelo de que no llorara, pero luego la piel lacerada y sangriento comenzó a quemar ennegreciendo y ardiendo bajo la runa como si fuera fuego. Y ella no pudo evitar lanzar la cabeza hacia atrás y comenzó a gritar y grita.

Londres 1873

“Will” Charlotte Fairchild entreabrió la puerta del cuarto de entrenamiento del instituto. “¿Will estás ahí?”Un gruñido sordo fue la única respuesta. La puerta se abrió por completo, revelando la habitación de techos altos que se encontraba al otro lado. Charlotte había crecido entrenando allí, y conocía cada cambio de la habitación. El antiguo blanco pintado en la pared norte, las ventanas cuadradas, tan viejas que eran más gruesas en la base que en la parte superior. En el medio de la habitación estaba Will Herondale con un cuchillo en su mano derecha.Giró la cabeza para mirar a Charlotte, y ella otra vez recordó lo extraño que él era.- A pesar de que a los doce años seguía siendo apenas un niño, era muy lindo, con el cabello espeso y oscuro, el cual se ondeaba ligeramente dónde tocaba su nuca -se encontraba cubierto de sudor y pegado a su frente. Su piel había sido bronceada por el sol y el aire campestre, en su primera llegada al Instituto. Aunque seis meses viviendo en la ciudad habían bastado para quitarle su color, causando ese destacado rubor en sus pómulos. Sus ojos eran de un inusual y luminoso azul. Hubiera sido un hombre realmente atractivo si pudiera hacer algo con respecto al ceño que constantemente retorcía su semblante.“¿Qué pasa, Charlotte?” Espetó. Todavía hablaba con un suave acento Galés. Un problema en sus vocales que podría haber sido encantador si su pronunciación no hubiera sido tan agria. Se froto el antebrazo sobre su frente a la vez que ella caminaba a través de la puerta, luego se detuvo.“Te he estado buscando por horas” Dijo con aspereza, ya que eso tenía un pequeño efecto sobre Will y nada tenía efecto sobre él cuando estaba malhumorado. Y siempre lo estaba. “¿No recuerdas que ayer te dije que hoy le íbamos a dar la bienvenida a un nueva persona en el instituto?”“Oh, lo recuerdo” Will lanzó el cuchillo y este se clavó justo fuera del circulo del objetico . Frunció el ceño. “Simplemente no me importa.”El chico detrás de Charlotte lanzó un sonido ahogado. Una risa, pensó ella. Pero ¿cómo podía estar riendo? Había sido advertida que el chico que llegó al Instituto desde Shangai no estaba bien. Pero se exaltó cuando él bajó del carruaje pálido y balanceándose como una hoja en el viento. Su oscuro cabello rizado, moteado con canas plateadas hacían que pareciera un hombre entrando a sus ochentas y no un niño de doce años. Sus ojos eran grandes, de un color negro-plateado al mismo tiempo, era algo extrañamente hermoso atrapado en un rostro tan delicado.

“Will, debes ser educado” Dijo, atrayendo al chico nuevo hacia ella y adentrándolo en la habitación. “No te preocupes por Will, él es solo tímido. Will Herondale, te presento a James Carstairs del Instituto de Shangai.”“Jem” Dijo el chico.”Todos me llaman Jem” Dio otro paso hacia la habitación, su mirada se mantenía en Will con una amistosa curiosidad. Para sorpresa de Charlotte, su voz no mostró ningún rastro de acento. Pero por supuesto, si su padre era –había sido- británico. –Tú también puedes.“Bueno, si todos te llaman de esa manera, no es un ningún favor especial para mi ¿o sí?” El tono que empleó Will era ácido para alguien tan joven. Era increíblemente capaz de ser desagradable. “Creo que debes entender, James Carstairs, que si te metes en tus asuntos y me dejas solo será lo mejor para ambos.”Charlotte suspiró para sus adentros. Tenía la esperanza de que este chico con la misma edad de Will lograra desarmar su ira y crueldad. Pero estaba claro que a Will no le interesaba si otro chico cazador de sombras llegaba al Instituto. Él no quería amigos. Ella miró a Jem, esperando verlo sorprendido o dolido, pero solamente estaba sonriendo un poco, como si Will fuera un gatito que hubiera intentado morderlo. “No he entrenado desde que dejé Shangai” Dijo él. “Podría usar a un compañero, alguien con quien entrenar.”“Así que también podría” dijo Will. “Pero necesitaría a alguien que me soportara. No una criatura enferma que parece estar feliz frente a la tumba. Aunque supongo que debes servir para tiro al blanco.”Charlotte, sabiendo lo que le había hecho a Jem Carstairs –hecho que no compartía con Will- sintió una horrible culpabilidad. Feliz frente a la tumba, Oh,Señor. ¿Qué habría dicho su padre? Que Jem dependía de una droga para vivir, algo parecido a una medicina que alargaba su vida pero no lo salvaba de la muerte. Oh, Will.Ella se interpuso entre los dos chicos, como si pudiera proteger a Jem de la maldad de Will, más preciso en este momento como nunca antes lo hubiera sido.Sin embargo Jem permaneció con la expresión intacta.“Si con ‘Feliz frente a la tumba’ te refieres a morir, entonces sí” Dijo. “Me quedan aproximadamente dos años más de vida, tres si tengo suerte. Eso me contaron.” Incluso Will no pudo ocultar su sorpresa. Sus mejillas se sonrojaron.”Yo…”Pero Jem había dado unos pasos hacia el blanco pintado en la pared. Cuando lo alcanzó tiró de la daga. Luego se volvió y caminó directo hacia Will, con delicadeza, y sólo unos centímetros entre uno del otro y sus ojos se encontraron con ayuda.“Puedes practicar tiro al blanco conmigo, si quieres” Dijo Jem, como si estuvieran teniendo una charla sobre el clima. “Creo que debo estar un poco aterrado, ya que no eres un buen tirador” Giró sobre sus talones, apuntó y dejó que la daga volara. Esta se clavo perfectamente en el centro del blanco, temblando ligeramente. “O” Murmuró Jem, volteándose para ver a Will. “Puedes dejarme enseñarte. Me considero un muy buen tirador.”Charlotte estaba impresionada. Por medio año había visto como Will alejaba a todo aquel que quisiera acercársele –tutores, su padre, su prometido, Henry; hasta los dos hermanos Lightwood-, con una combinación de odio y mutua crueldad. Si no fuera porque ella fue la única persona que lo vio llorar hubiera imaginado que él jamás sería bueno con nadie. Y entonces ahí estaba mirando a Jem Carstairs, un chico tan frágil que parecía estar hecho de cristal, con la dureza de su expresión suavemente disolviéndose en una tentativa incertidumbre: “Realmente no vas a morir” Dijo, con el más inusual tono de voz. “ ¿O sí?”Jem asintió. “Eso me han dicho.”“Lo siento” Susurró Will.“No” Dijo Jem, suavemente. Dejó su chaqueta a un lado y tomó un cuchillo de su cinturón. “No seas tan ordinario. No digas que lo sientes. Di que entrenarás conmigo.”El Sostuvo el cuchillo frente a Will. Charlotte contuvo la respiración, temerosa de moverse. Se sentía como si estuviera viendo algo muy importante, aunque no sabía con exactitud qué.Will extendió la mano y tomó el cuchillo. Sus ojos nunca dejaron de mirar el rostro de Jem. Sus dedos acariciaron los del otro muchacho cuando tomó el arma.Fue la primera vez, pensó Charlotte, que ella lo vio tocar a otra persona con entusiasmo.“Entrenaré contigo” Dijo él.

1 comentario:

  1. Interesante, aunque creo que no leeré el libro. Igualmente, gracias por compartirlo (:

    Por cierto, ¿nos seguimos?

    Un besete :D

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